Corticeira Viking se fundó en 1995, fruto de la unión entre un distribuidor sueco (de una amplia gama de productos, incluido el corcho) y un fabricante portugués de productos de corcho.
La diversidad de productos, en áreas como Vajilla, Vajilla, Industrial, Vinos y Lifestyle, le otorga a Corticeira Viking una posición de liderazgo en un mercado altamente competitivo.
La preocupación por el medio ambiente está muy presente en el método de producción de la marca. Las materias primas utilizadas en sus productos siguen la política interna de calidad y responsabilidad ambiental. Además, toda la producción funciona en base a casi ningún desperdicio: todo el corcho restante se recicla para volver a convertirse en materia prima.
Viking Corticeira es reconocida por PETA como una marca vegana.